La enfermedad mental y/o física no sólo afecta a la persona que la padece, sino también a su entorno. Habitualmente, como consecuencia del cuidado del enfermo aparecen problemas en la convivencia familiar. Por esta razón, hablamos de la importancia de cuidar al cuidador.

Los principales problemas que encontramos para mantener un clima adecuado son:

• Problemas de comunicación con el familiar afectado
• Dificultades para llegar a acuerdos y tomar decisiones conjuntas
• Sobre-implicación emocional, es decir, cuando el familiar se involucra demasiado, se comporta de forma excesivamente controladora con el enfermo y se centra exclusivamente en el cuidado de la persona enferma, sacrificando su vida personal. Esto provoca que en ocasiones, los cuidadores lleven un estilo de vida que daña su salud y su capacidad para seguir cuidando.
• Sentimientos de culpabilidad de los familiares: el cuidado del enfermo conlleva una pérdida de contactos sociales y dejan de realizar actividades porque temen que le ocurra algo desagradable al familiar afectado y consideran que no es aceptable hacer cosas agradables, mientras otros cargan con sus responsabilidades.

Mensaje a los familiares de personas afectadas por una enfermedad, “cuidando de tí mismo, también estas cuidando de tu familiar”.

El cuidado de una persona enferma es un trabajo duro y requiere de muchas dosis de paciencia, y para poder proporcionarlas necesitamos conocer nuestras limitaciones y como tal, aceptarlas.

10 consejos para reflexionar, NECESITO:

• cuidar de mí mismo a fin de poder continuar haciendo cosas que son importantes
• priorizar en mi estilo de vida para poder dedicar mi tiempo y energía a aquellas cosas que verdaderamente son importantes
• concienciarme que debo delegar tareas y compartir la responsabilidad del cuidado con otros
• organizar mi día porque facilitará mi vida y la de mi familiar
• potenciar que el familiar haga por su cuenta el mayor número de actividades posibles
• recordar que mi familiar no esta siendo difícil a propósito sino mas bien, su comportamiento y emociones están distorsionadas por la enfermedad
• compartir mis preocupaciones y problemas con personas de confianza
• aceptar el cariño y apoyo de otras personas
• realizar actividades agradables y de ocio, quedar con amigos y tener relaciones sociales diversas
• mantener el sentido del humor porque la risa me permite mirar las cosas desde una perspectiva mas positiva

En la Consulta Psicológica Madrid nos preocupamos también de vosotros, los cuidadores.

Estamos a vuestra disposición para cualquier duda, consulta o apoyo.